Por Lizbeth Duran, Asistente Legal de NWJP.
Soy migrante y he trabajado en el campo. Ahora trabajo con Northwest Workers’ Justice Project como paralegal en el sur de Oregón defendiendo los derechos de los trabajadores y trabajadoras, y me da la oportunidad de ver que si tenemos voz, que no somos invisibles y que hay quienes velan por nuestros derechos y nos empoderan. No tienen idea de que tan dignificante y significativo es que ahora yo pueda defender los derechos y empoderar a los trabajadores/as compartiendo información sobre sus derechos y como protegerse en el trabajo.
Formo parte de un proyecto en colaboración con otras organizaciones enfocado a trabajadores en la industria del cannabis. Estamos dando servicios a trabajadores a quienes se les ha violentado sus derechos laborales e incluso han estado en situaciones de trata de personas. Les ofrecemos representación legal para que se les garanticen sus derechos laborales, así como posibles opciones de alivio migratorio, apoyo financiero y apoyo psicológico. Aún no ha comenzado la temporada de cultivo, por lo que estamos sumando esfuerzos para la difusión de la información de los derechos laborales, recomendaciones de seguridad y autocuidado en el trabajo. La situación es compleja, pero esperamos que los trabajadores acudan a nosotros para buscar información o ayuda en los próximos meses.
En este proyecto se intenta disminuir los abusos laborales y que los trabajadores no se expongan a situaciones de riesgo. Todo esto significa mucho trabajo cooperativo y recursos, así que es para mí muy importante formar parte de este proyecto en colaboración de Northwest Workers’ Justice Project con Oregon Law Center, Legal Aid Services of Oregon para servicios legales, UNETE Center for Farm Worker Advocacy y Centro de Servicios para Campesinos con servicios comunitarios, y Raíces de Bienestar con servicios psicológicos.
